Qué es lo que caracteriza a un clásico
Antes o después llama a todas las puertas: la voz que reclama una renovación de la casa. El tema de las contraventanas surge poco después, ya que las ajadas contraventanas de madera exigen tomar una decisión. ¿Volver a pintarlas? ¿O es mejor sustituir las viejas de madera por otras modernas de aluminio? La solución: las contraventanas de aluminio no solo constituyen la elección correcta, sino que son los nuevos clásicos. Le desvelamos el por qué.
Las contraventanas tienen un cierto encanto, ya que su decoración y los detalles ornamentales transforman la casa en un hogar. Y, en este sentido, las contraventanas de madera aportan una imagen armónica pero traen consigo ciertas desventajas: necesitan muchos más cuidados. Hay que aceitarlas y pintarlas con cierta regularidad, ya que el propio barniz solo dura un par de años, e incluso con limpiezas y arreglos de pintura minuciosos, las condiciones meteorológicas acaban afectando a la madera.
En la actualidad se busca sobre todo funcionalidad y sostenibilidad, la estética sola ya no es suficiente. Y esa es la razón por la que las contraventanas de aluminio llevan ventaja: aportan los beneficios estéticos de los clásicos de madera pero eliminan la parte negativa de estos.
Las contraventanas de aluminio son lo mismo que las contraventanas de madera. Comenzando por las láminas hasta los retenedores en diversas formas y colores, pasando por cintas y charnelas personalizadas: las opciones son infinitas. Incluso se puede conseguir fácilmente la estética de las de madera con una decoración de este material que parece real.
Las imágenes de las referencias de EHRET en Schaffhausen lo muestran con especial habilidad: en este caso, las antiguas contraventanas de madera se sustituyeron por otras de aluminio de EHRET. Se mantuvo el encanto y la autenticidad del diseño de la fachada e incluso se mejoró con las decoraciones añadidas como los retenedores de las contraventanas con forma de cabeza de mujer o los diseños hechos con láser.
No obstante, la ventaja crucial de las contraventanas de aluminio reside en su resistencia al clima, ya que el cuidado de este robusto material se hace en intervalos más espaciados y la preocupación por las posibles marcas de las inclemencias y del paso del tiempo es mucho menor. La larga vida útil y la estabilidad de la forma del aluminio transforma las contraventanas EHRET en compañeros fieles y duraderos.
También el mundo cromático es una de las virtudes esenciales: las contraventanas EHRET no solo están disponibles en una impresionante variedad de colores sino que, a diferencia de las contraventanas de madera, estos son uniformes y no se decoloran. Gracias al método del recubrimiento en polvo no solo se elimina la necesidad de pintar de nuevo, sino que, además, no se generan restos de pintura, algo prácticamente inevitable de otra forma. ¡Hola, sostenibilidad!
Hay múltiples razones para apostar por las contraventanas EHRET: convencen por su calidad y sus opciones de diseño, al tiempo que cumplen las exigencias actuales de duración y sostenibilidad. Justo lo que caracteriza a un clásico.